miércoles, 23 de enero de 2008

Cuentos aveleanos

Un cuento intrigante, y de final incierto. Ha nacido desde Finisterre para el mundo perdido...

La Bela Dona y el Beleño
Erase una vez en una tierra muy muy muy muy muy muy muy muy muy muy muy muy muy muy muy muy muy muy muy muy muy muy muy muy muy muy muy muy muy muy muy muy muy muy muy muy muy muy muy cercana...
Una Bela dona de nombre particular, pero eso es para mas adelante... un día ella iba paseando por un lago de cisnes, que de cisnes solo tenia el nombre pues sobre una ladera de tal, había una roca con forma de 2 cisnes mirando al cielo, en su caminata diurna recogiendo sus flores habituales, para luego concluir en el rito que hacia todos los días desde (hace vario tiempo digamos) de dejarlas posadas en el lago para que se los lleve el viento hacia el fondo de tal.. juntando una por una iba haciendo el ramillete, realmente nunca se supo bien por que este habito pero era incesante parecía disfrutar de el, un día en su cotidiana recolección luego de haber juntado en su mayoría las acostumbradas flores, ve a lo lejos o no tan lejos un pequeño bote en el medio del lago, algo rustico pero no por eso menos apreciable, lo mas llamativo es que no estaba encallado, dentro había una persona, de sexo dudoso por la distancia separativa, poco a poco ese bote se fue haciendo mas visible, se acercaba lentamente a la orilla y así a cada segundo se hacia mas visible aquella figura borrosa, fue sorpresa al ver que un beleño era el que sostenía en sus brazos 2 remos...no se podía fácilmente deducir que edad podría tener iba desde unos 17 a 20 años maso menos, al ver que se aproximaba hacia ella realmente no supo que hacer si irse raudamente por aquella presencia tan poco usual, acercarse mas a la orilla por curiosidad, no ninguna de las dos, solo atino a quedarse inmóvil viendo arremeter irremediablemente ese bote hacia los pies del lago.
El joven, al llegar y ver a esa señorita, tan campestre pero con un aire de ciudad en sus ojos, se sorprendió al ver esa postal tan particular entonces pregunto: Que haces con ese ramo de flores ?~ Ella no supo que decir, el volvió a insistir y recién ahí pudo expulsar un efímero... "Hola" el sonrió picaramente, y devolvió el saludo, luego ella cayo en la cuenta que algo no iba a ser lo mismo después de ese día algo se lo dijo...
El beleño realmente interesado volvió a preguntar : Para que llevas esas flores y esas vallas entre tus dedos ?, esta vez ella si respondió, con algo de timidez entre sus notas, por primera vez pudo hablar con soltura y los ojos de el se abrieron grandes al ver su voz tan particular, el interesado quiso saber por que hacia eso... pero ante el amago de preguntar de nuevo, se detuvo y la invito a su bote, luego le propuso una invitación dudosa : "Subí a mi bote veni, hoy podrás ver tus flores hundiéndose en el medio del lago, en los mas profundo de el" ella había perdido su perceptible miedo al extraño, pero aun algo no le cerraba, igual de todos modos ella accedió con un gesto, el bajo para ayudarla a subir y que su vestido no se mojara, eso produjo un "gracias" entre sonrojos, una vez ambos arribados, el bote empezó a moverse y partió, allí en los primeros metros ella lo miraba no podía dejar de mirarlo, y el remaba comentado algunas palabras que se perdieron con la brisa que abrazaba esa tarde, volviendo a la realidad asalto con una pregunta feroz, "Como te llamas?" el no emitió sonido alguno, pareció como si lo hubiera molestado aquel interrogante, por unos momentos volvieron al principio, la mirada de el se perdió entre los árboles del otro lado del agua, fijos esos ojos, negros, profundos, había algo mas detrás de esos ojos, unos ojos negros como no se ven todos los días... se perdían donde cualquiera se pierde entre el espesor de aquel bosque. Pasados unos segundos, el vaticino un "Lo siento solo que mi nombre no interesa, por lo menos por ahora"; ella sintió algo de culpa por haberlo incomodado, pero a la vez realmente necesitaba saber su nombre, pero aquel "lo siento" la conforto bastante. Cuando callo en la cuenta, ambos estaban en el epicentro del lago, era indescriptible aquella vista, todo se ve distinto cuando uno es el centro de algo, cuando es lo mas profundo para algo o alguien, en este caso del lago, las nubes que corrían en el cielo manchaban la luz que caía sobre el agua, haciendo que sea realmente una obra de arte, un esquema de belleza geográfica inimaginable.
Hubieran sido segundos para cualquier otro par de personas del mundo, pero para ellos 2, eran instantes posándose sobre el reloj del tiempo, cada segundo era un instante en ese lugar, comenzando entre murmullos empezaron a hablar uno tras de otro, cada sonido era perpetuado por ellos y por aquel paisaje que por momentos, solo por momentos parecía oír y ver como tercer espectador de aquella tarde, allí el le dijo que le intrigaba saber por que hacia ese acto con las flores días tras día... ella contesto que no sabia, era algo que ella no decidía, algún día que ella no recuerda empezó con ese ritual, y nunca mas había dejado de hacerlo, el trato disimular pero en su boca se dibujo una sonrisa lasciva, fue ahí nomás que le dijo, que nunca dejara de hacerlo pues ese era un acto del corazón, si hubiera sido de la razón el dijo, ya habría dejado de hacerlo por que le hubiera dicho que era algo innecesario y entonces no habría cometido ningún fin positivo, pero en cambio el corazón no busca ningún fin, por que el no busca caminos que se saben donde empiezan o donde terminan, el vive solo por el hecho de vivir, y no le importan las salidas o las metas, sino el camino que recorre, el corazón solo actúa y siente, no mide y especula...
Ella se sintió extraña ante esas palabras, realmente era algo que no esperaba, pero era normal que así sucediera, no siempre se le cruzaba un extraño a hablarle de ese tipo de cosas, menos un beleño como aquel, pero ese no era cualquier beleño, ella sabia que no era uno mas entre tantos, algo detrás de esos ojos ocultaba y ella iba a lograr descubrir ese secreto, por lo menos así lo pensaba.
Luego, el se la quedo mirando de manera fija, ella bajo la mirada y con voz tenue le pregunto por que la miraba, y el solo respondió, estoy esperando ver uno de los actos mas extraños que halla visto, ella no entendía que es lo que le quiso decir, entonces con un gesto en su rostro pregunto por que, el comento que seria la primera vez que vería a una flor dejar ahogar a sus hermanas en el lago, ella entendió el piropo luego de unos segundos y eso sumado a su lenta, pero no menos tierna, reacción hizo que se sonrojara por segunda vez, entonces recordó para que habían embarcado juntos hacia ya un rato largo, entonces procedió con su costumbre, esas manos no llevaban las flores entre sus dedos, las flores flotaban por encima de sus blancas manos, era algo que no parecía real, tal vez era una ilusión que el mismo joven se hacia en su mente, pero no quiso borrarla de su mente, así que dejo fluir su imaginación... Así ella poso como si fuera la madre de aquellas, sus manos sobre el agua y luego las abrió para dar paso a las flores, y su destino fatal. Fue algo tan simple como maravilloso, no supo si fue por la delicadeza de como lo hizo o la belleza de aquel ramo, ni el brillo en los ojos de aquella Bela dona, sumado al reflejo del agua iluminando ese rostro, ese rostro tenia algo...
...Algo que tarde o temprano iba a mutilar la mirada de ese Beleño.
Una vez vueltos de ese estado de letargo que habrá durado unos 30 segundos, pero realmente paso como si hubieran sido 30 minutos, el volvió en si a su realidad, y se dio cuenta que el tiempo es tirano...
Entonces, le susurro al oído, como si no quisiera que nada ni nadie mas se enterara de lo que estaba por decir, de lo que estaba por confesar, yo he nacido sin nombre, mi nombre solo lo sabe Dios y una persona en este mundo, esa persona no la conozco pero la reconocería si la viera, pues solo mi alma gemela conoce mi verdadero nombre, y solo yo se el nombre de mi alma gemela.
Esta predestinado que algún día la conoceré, vos también lo harás...
Ella se quedo muda al oír tal secreto, que un escalofrió le recorrió el cuerpo desde la punta de los pies hasta el ultimo pelo de su cabeza, pero ese momento se vio interrumpido por la carrera del sol contra los árboles, perdiéndose en el horizonte, entonces ella dijo : "Es tarde, debemos volver." el con algo de tristeza como la de un niño cuando debe ir a comer y dejar de jugar, asintió con la cabeza, entonces sus manos empezaron a mover los remos, muy lentamente para no desperdiciar ningún instante, y sin sacarle los ojos de encima a la muchacha, ni siquiera para ver ese olímpico paisaje...
…Un solo pensamiento cruzaba las mentes del Beleño y la Bela dona, esa tarde había marcado algo, pero uno de los dos no sabía que era, el otro lo sabia y era el As que guardaba bajo su manga...para ganar un juego que había empezado hace mucho tiempo.
Llegados a la orilla la imagen del principio se repetía pero en reversa, nuevamente tendió la mano, luego de bajar del bote, a la Bela dona pero esta vez no sonrojo apoyo sus descubiertos pies sobre la hierba que crecía alrededor del lago dejando sus marcas por doquier, había llegado el momento final, ella no supo que decir, el tampoco, parecía que esa tarde se consumía y el fuego era el tibio calor que irradiaba los últimos rayos de sol que los acariciaba; entonces ella dijo : "Entonces aquí termina este día" el dijo que así era.. O no? de todos modos ninguno hasta entonces sabia el nombre del otro... ahí nomás ella abrió sus labios para dejar escapar su nombre en eterna libertad, pero el puso su dedo índice sobre sus labios y le dijo, no digas nada Camila, no hace falta que me lo digas...
Los años pasaron y nadie nunca volvió a ver a la Bela dona, y el beleño... pues es otro misterio para otra ocasión... o tal vez no.
Algunos dicen que todas las tardes en aquel lago perdido, ambos cisnes de piedra, salen de su estado de letargo eterno, sin vida… y nadan hasta el medio del lago para hundirse y hacer el amor, sobre el colchón de flores que la Bela dona dejo como un legado a ese Monumental paisaje de almas, hasta el nuevo atardecer para convertirse nuevamente en piedra sin vida salvo muy dentro hasta el fondo donde todavía viven 2 corazones eternos. FIN?

1 comentario:

Ciudadano_ dijo...

Que groso Avelito, era hora de tenerte por acá! :D